Quema de Expedientes: ELEVAN A JUICIO OTRA CAUSA CONTRA MILAGRO SALA

La instrucción estuvo a cargo del Dr. Diego Cussel, habilitado como Agente Fiscal de Causas Ley 3584.. Según obra en el expediente N° 1278/11, Marcos Daniel Romero es acusado como supuesto autor de los delitos de “Cohecho Pasivo”, previsto por el Artículo 256 del Código Penal de la Nación, y “Sustracción de documento público”, según lo prevé el Artículo 255 Código Penal de la Nación, en concurso ideal con el de “Sustracción o destrucción de documento”

Por su parte el abogado Antonio Alberto Bellido, es acusado como supuesto autor del delito de “Cohecho activo” y “Sustracción de documento público”.

Milagro Amalia Ángela Sala es acusada como supuesta determinadora directa del delito de “Cohecho activo”  y de “Sustracción de documento público” en concurso ideal, con el de “Sustracción o destrucción de documento”.

 El caso

 El hecho por el cual se solicitó citar a juicio de los tres imputados, ocurrió entre el 22 y 25 de diciembre del año 2009.

De acuerdo a lo que obra en el expediente, en la mañana del 22 de diciembre, Marcos Daniel Romero, empleado judicial,  aprovechó que su compañero de oficina se retiró para adueñarse del expediente N° 1401/07 caratulado: “Ávila y Páez p.s.a. del delito de Tentativa de homicidio” (enfrentamiento armado donde resultó herida una menor de edad). El mismo estaba compuesto por 800 fojas divididas en 4 cuerpos.

El empleado sacó del juzgado el expediente, luego de haber planeado esta maniobra con el otro acusado, Alberto Bellido por instrucciones directas de Milagro Sala, con la finalidad de destruir el documento.

La noche del 25 de diciembre, el abogado acusado buscó en su vehículo a Romero, quien llevaba consigo el expediente y se dirigieron a casa de Milagro Sala.

Allí, le expresan que procederían a quemar la documentación.

Se dirigieron a un basural ubicado en barrio Norte, donde destruyeron y quemaron el expediente en su totalidad.

Tras cometer el hecho, el abogado le pagó una importante suma de dinero a Romero, dinero que previamente Milagro Sala había entregado al letrado.